11 febrero, 2007

Golpe...

La verdad es que muchas veces es mejor observar las tiras gráficas de algunos periódicos que leer los editoriales o artículos de los mismos. Es el caso de Forges. Bien vale pagar el euro que nos cuesta El País, sólo por observar la vida a través de sus ojos.

La verdad es que me apetecía hablar del estatuto de Cataluña. Pero no es tarea fácil. Y no lo es porque parecía que los ciudadanos, a través de sus representantes (en el Parlamento de Cataluña y después en el Parlamento de España), se habían pronunciado. Hay que recordar que, por si fuera poco lo anterior, hubo un Referendum, ya se sabe aquello de lo de un hombre, una mujer: un voto, que ratificó por los ciudadanos el actual Estatuto (sí, quizá hubo mucha abstención, pero no le resta valor al hecho). Y ya que estamos, no viene mal recordar que durante una buena parte del siglo XX, lo del voto y la democracia, especialmente durante la dictadura franquista, brilló por su ausencia, y bien parece que algunos (¿hijos de aquéllos?) añoran dicha época. Que pena, con lo que se había andado. El PP ( o este PP) es así.

Si os apetece la lectura, transcribo parte de dos buenos artículos, también se pueden leer enteros, son de Sol Gallego y Javier Pérez Royo.

"...La mayoría de sus conciudadanos suele llegar a su casa cansada de ganarse la vida, de pagar sus facturas, de criar a sus hijos, de comportarse responsablemente en el trabajo. Y al día siguiente esos mismos ciudadanos vuelven a comportarse responsablemente en el trabajo, en su vida, en su familia... Se merecen el respeto de quienes representan las instituciones que organizan su convivencia. Llevar al TC a la picota, provocar en los ciudadanos la idea de que es un foro de debate sectario en el que no se protege el orden constitucional sino los intereses electorales de un partido político y hacerlo, encima, para proteger su rectitud y fama, es una burla de la que no es acreedora la ciudadanía de este país.El Tribunal Constitucional es una pieza esencial del sistema político español, una pieza sensible que desarrolla un poder enorme en cuanto que es el único capaz de controlar al propio legislador."
"...Este es el problema con el que tenemos que enfrentarnos. O se da por bueno el golpe de Estado y se acepta que a través de una turbia maniobra y con un Tribunal Constitucional mutilado se puede quebrar la voluntad democráticamente constituida mediante la negociación entre el Parlamento de Cataluña y las Cortes Generales, voluntad refrendada por los ciudadanos en referéndum, o se hace frente al golpe de Estado, restaurando la legalidad y constituyendo un Tribunal Constitucional no mutilado que resuelva como el principio de legitimación democrática del Estado exige. Que hayamos llegado hasta aquí es un desastre. Pero de nada vale lamentarse. Estamos donde estamos. En este tipo de crisis es donde un sistema político se la juega. O prevalece la voluntad democráticamente constituida o prevalece el golpe de Estado. No hay más alternativa."

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Félix, voy a intentar ser un asiduo de tu blog, con ánimo de polemizar, como los escolásticos, creo, aquellos que defendían una cosa y la contraria. Es decir, dar no mi versión, aunque sí a veces, sino citas que se oponen a tus criterios o los de tu lecturas.
Espero que de esa forma nos enriquezcamos intelectualmente los dos, y aquellos que nos puedan leer, a los que desde aquí, animo también a escribir.

Hoy hablas de "Golpe..."

No; Félix, yo creo que no hay golpe, aunque algunos así lo vean.

Veamos:

Soledad Gallego Díez escribe:

<<.El Tribunal Constitucional es una pieza esencial del sistema político español, una pieza sensible que desarrolla un poder enorme en cuanto que es el único capaz de controlar al propio legislador.">>

Suscribo plenamente el anterior párrafo de Soldedad Gallego Díez.

Javier Pérez Royo escribe:

"O prevalece la voluntad democráticamente constituida o prevalece el golpe de Estado. No hay más alternativa"

En mi opinión, esa frase es una auténtica barbaridad, porque no hay golpe de Estado y sí hay más alternativas.

Como de lo que se está hablando es del Estatuto de Cataluña, y deliberar su constitucionalidad o no, en razón a si asiste o no Pérez Tremps, Victoria Prego en El Mundo de hoy, 11-0-2007, página 12, nos desvela que:

"Pérez Tremps ya se abstuvo antes en tres ocasiones porque había emitido dictámenes",

y en el texto nos relata:

"Por tres veces, y en tres recursos de inconstitucionalidad planteados por la Junta de Extremadura, este juez del TC anunció su abstención por la sencilla de que, no unos pocos meses antes como ha sido el caso con el Estatuto de Cataluña, sino cinco o seis años antes de que esos recursos fueran planteados, él había emitido dictámenes sobre las normas luego recurridas. En todas esas ocasiones y, dado que los magistrados del TC no pueden ser sustituidos, el tribunal siguió funcionando con 11 miembros sin que ninguna de las partes planteara a voz en grito que el equilibrio del Alto Tribunal había quedado roto y que estábamos ante un golpe de Estado o, como poco, ante una maniobra política de la peor estofa.
Esto ha sucedido muchas veces en el Tribunal Constitucional antes de que se planteara este caso concreto relacionado con el Estatuto de Cataluña..."

Como ves, no hay golpe de Estado que valga. El problema primero es que Cataluña no es Extemadura, desde el punto de vista del ruido mediático, (pese a Rodriguez Ibarra), y el problema segundo es la politización de la Justicia.

Todavía no se han reunido y ya se sabe por las supuestas "opciones políticas" de sus miembros que la solución al Estatuto será un 6-6, a favor del Gobierno, o sea que es constitucional, si Tremps dimite, y el Gobierno pone a otro su cuerda, debido al voto de calidad de la presidenta, favorable al Gobierno; o de 5-6, a favor de la Oposición, o sea, que es inconstitucional, si se quedan en once, como en tantas otras ocasiones.

Esa es la pena. Porque lo suyo, visto el recurso desde el punto de vista jurídico, sería que quedaran 12-0, unanimidad, o como mucho 10-2, con un par de votos particulares discrepantes. Como en la multitud de sentencias del TC que llenan mensualmente los suplementos del BOE.

Que antes de deliberar ya se sepa que hay seis votos favorables y seis discrepantes, es para reflexionar que está pasando; en la Política y en la Justicia, pero en modo alguno para asimilar dicha postura a un golpe de estado.

Tú mismo escribes (permiteme que te tutee) que:

"Los ciudadanos, a través de sus representantes (en el Parlamento de Cataluña y después en el Parlamento de España), se habían pronunciado. Hay que recordar que, por si fuera poco lo anterior, hubo un Referendum, ya se sabe aquello de lo de un hombre, una mujer: un voto, que ratificó por los ciudadanos el actual Estatuto (sí, quizá hubo mucha abstención, pero no le resta valor al hecho)".

Siendo ello cierto; aunque debes recordar que el voto favorable fue únicamente un tercio del electorado; no lo es menos que aquellos que se opusieron en el Parlamento de Cataluña, y luego en el Parlamento de España, lo hicieron porque observaban la posible inconstucionalidad del mismo, y no le irás a negar el derecho a recurrir al Tribunal Constitucional, como los cientos que llenan los suplementos de los Boletines, o incluso la propia Junta de Extremadura.

Y ello no tiene que ver nada con el voto de la dictadura, (piensa que estás comparando al PP con los socialistas extemeños, solo por el hecho de la interposición del recurso), que en aquella época franquistas fuimos todos, hasta el padre de Zapatero, supongo.

Leete sino lo que dice Martín Prieto en "El purgatorio de los libros" (El Mundo 11-02-2007, página 4), comentando el libro "La gran revancha: la deformada memoria histórica de Zapatero", a propósito de éste:

"Hijo de un abogado beneficiado por el regimen franquista, estudió como buen niño pijo en un colegio privado de León fuertemente confesional, y no debió irle tan mal cuando mandó al mismo colegio a sus niñas antes de instalarse en Majadahonda".

En fin, hablábamos del Estatuto, y a propósito del artículo de Pérez Royo, decía que sí había alternativas. Yo creo que si las hay.

Despolitizar a los jueces, y que sean ellos mismos los que decidan, a través de sus órganos internos, de forma mas o menos regulada, a modo de escalafón, quienes deben ocupar cada puesto, sería un sistema.

Porque decidir políticamente en otro poder del estado, incluso por consenso, pongo a este porque me gusta..., ¡que quieres que te diga!.
Porque creerás en la separación de poderes, supongo. Pues aunque se está intentando (pienso en el espectáculo de Ibarreche de hace dos semanas), y eso sí sería una tragedia, un auténtico golpe, Montesquieu no ha muerto.

Bueno, creo que me he extendido bastante. Pido disculpas por la extensión.

Venga, Félix, ánimo y a por el cambio en La Rioja.

Félix Caperos dijo...

Hola Pinolero. Gracias por tu visita. Quiero agradecerte el tono y la voluntad de tus comentarios. Es verdad que todo cuanto podamos rebatirnos o discernir desde nuestras diferentes posturas puede venirnos bien.

Por lo demás, creo sinceramente, más allá de expresiones literales, como las de "golpe", que evidentemente no se refieren a lo militar, pero que sin duda evidencian "un golpe de mano judicial" que la situación no hace nada bien al Estado. No me refiero al Gobierno, que tampoco le viene bien, me refiero a lo que Sol Gallego, explica como crisis de confianza de la institución. Es posible, sin duda, rebatir cada coma, incluso es posible aducir la alta abstención (aunque sólo se hace cuando interesa); es posible también invocar el derecho de las comunidades (y de las personas físicas) a recurrir al TC (¿cómo no?), pero de lo que se trata, y eso lo creo de veras, es de otra cosa, es de conquistar el Poder como sea. Sí, así. El PP, y un sector que tiene una idea de España similar, creen que lo que ellos piensan, porque además dominan ciertos sectores (como la judicatura), debe imponerse por todos los medios. Nuevamente recurro a unas palabras de Pérez Royo que ha escrito estos días sobre el tema que nos ocupa:

"Desde 1989 el PP solo ha aceptado el resultado electoral en dos ocasiones, 1996 y 2000. En 1989 intentó la anulación de las elecciones a través del poder judicial. No lo consiguió, porque no prosperó el recurso en Barcelona, pero no estuvo lejos de conseguirlo. En 1993 ya sabemos cual fue la reacción del PP hasta que consiguió quebrar la resistencia de CiU y forzar la convocatoria de elecciones anticipadas. Y lo que está ocurriendo desde el 14-M de 2004 salta a la vista."

o estas otras:

"El camino de impugnar el resultado electoral si resulta desfavorable, parece estar convirtiéndose en un camino sin retorno para la derecha española. ¿O es que se puede pensar que, tras lo que está ocurriendo en esta legislatura, los votantes del PP podrán aceptar un resultado en las próximas elecciones que no sea la victoria? Cómo vamos a salir de esta suerte de callejón sin salida en el que se está convirtiendo el sistema político español, no es fácil de prever. La prueba del nueve del carácter democrático de un partido es la aceptación de la derrota. El PP todavía no la ha pasado."

La verdad es que Montesquieu no ha muerto, pero hay quien se empeña cada día en, digamos, darle un "meneito" sino matarle. "El espíritu de las leyes" debe seguir vivo.

Anónimo dijo...

Hola Félix; gracias por tu réplica, y tus nuevas aportaciones.

Te diré de entrada que nunca he sido votante del PP, lo que pudiera acercarme algo más a tus ideas, que dicho sea de paso, un día las tuve, pero soy políticamente abstencionista desde 1989, sí, desde el año que el PP estuvo a punto de dar las vueltas a las elecciones por el recurso de Barcelona. Te agradezco el dato, porque lo desconocía. 1989 y 1993 para el ciudadano de a pie quedan ya muy lejos; la legislatura de 1993 creo que fue la del "váyase Sr. González", de Aznar; el "empleado de Murdoch" le llamáis, creo.

Es cierto que últimamente se percibe mucha crispación y encontronazos entre los tres poderes, legislativo, ejecutivo y judicial; pero no creo que el PP tenga más culpa que el PSOE en esos encontronazos.

Probablemente no reconozcas conmigo que la política del PSOE ha sido errática tanto en materia terrorista como en el tema estatutario.

Son dos asuntos de estado en el que los dos grandes partidos debieran estar unidos, y sin embargo, en mi opinión, ha sido el PSOE el que ha roto el consenso; pretendiendo el aislamiento del PP, y lo que es mas grave, su expulsión de la vida política, primero con el Pacto de Tinell (que leí en su día aunque te parezca increible; a través de algún enlace; y me pareció una aberración impresionante); y luego con el Pacto Antiterrorista. En éste se da la paradoja de que siendo Zapatero el que lo propuso, y puesto en práctica pese a las retincencias del PP, y vista su efectividad, que no me negarás, ahora resulta que es Zapatero el que no cree en sus propias propuestas, por sus alianzas con los grupos minoritarios, especialmente con ERC. Así que en querer conservar el poder a toda costa, también es cosa del PSOE, no te engañes.

Respecto del tema estatutario, su política también ha sido errática. No es que yo piense que lo que tenemos haya de ser inamovible, no, pero ha sido errática la forma en que se ha llevado a cabo. No sé lo que dirá el TC respecto del recurso del PP; también me he leído un poco por encima el Estatuto de Cataluña, y la verdad es que no me gusta nada el intervencionismo del mismo. Hay temas que me parece a mí que casan muy mal con la actual Constitución; aunque no sabría ponerte un ejemplo ahora, lo cual no quiere decir que la Constitución sea inamovible. Por eso hablaba de las formas. Si quieren que esos temas quepan en la Constitución, cambien primero la Constitución, y después discutan los temas con la nueva Constitución, que ahí ya cabrán, sin necesidad de crispar el ambiente.

Respecto al comportamiento del PP después del 14-M, pienso que también va inducido por el comportamiento del PSOE, errático en mi opinión. Y me explico.
En el tema del 11-M, el PP se encuentra solo, cierto; pero no por ello deja de tener un punto de razón en sus pretensiones de conocer la verdad de lo que pasó entonces. A mí, ciudadano de la calle, también me gustaría saber la verdad. Pero la verdad verdad, no la de Polanco. Y considerando que la génesis, planeamiento y ejecución tuvo lugar durante el gobierno del PP, el cual sería políticamente responsable por no controlar la situación previa al atentado; siendo el propio PP el que quiere saber en que falló, ¿porqué el resto de los grupos, con el PSOE a la cabeza quieren pasar página? ¿Qué tienen que ocultar? Nada. Pues a investigar.
Yo no creo que la ETA participara en el atentado, pero tengo dudas respecto a las conexiones con los islamistas. Y lo que resulta increíble es la actuación de la Polícia, con Sánchez Manzano a la cabeza.
Y el comportamiento mediático de aquellos tres días de marzo, con la SER, otra vez Polanco, a la cabeza, superó a las mentiras del Gobierno, y cometió aun mas errores por la presión mediática, pero visto el asunto en perpectiva, tuvo un comportamiento mas ejemplar que el de Zapatero tras el 30-D. Entonces había que saber; ahora hay que callar. ¿A qué esa diferencia?

En cuanto al "meneito" al "Espiritu de las Leyes", siendo el PP especialista, según tu criterio, no expresamente mencionado, cierto, el PSOE no le va a la zaga. Piensa que fue Felipe González, con su "apisonadora absoluta", el que comenzó a cambiarlas para tratar de unificar los tres poderes, y fue Alfonso Guerra, creo, el que dijo que Montesquieu había muerto.
Afortunadamente, no todavía, porque el día que así fuere, entraríamos de nuevo en otra dictadura. Y para los que amamos la libertad, sí que sería una tragedia.
Disculpa la extensión.
Un saludo y a por el cambio en La Rioja.